El Acero Inoxidable es un material altamente resistente y duradero. Lo que hace especial este tipo de acero es la incorporación de cromo y níquel, metales que lo protegen contra la oxidación y le da una prologada vida útil siendo inalterable a la corrosión. En nuestro caso, lo llamamos acero inoxidable 18/10 porque cuenta con un mínimo de 18% de cromo, que protege la pieza indefinidamente por su reacción con el oxígeno y 10% de níquel, lo que le da un aspecto atractivo y brillante.
Este material tiene una superficie lisa y sin poros que evita la acumulación de gérmenes y bacterias, y además lo hace súper fácil de limpiar.

¿Cómo cuidar nuestros productos de acero inoxidable?

• Antes de su primer uso: En el caso de los sartenes colocar un poco de aceite y calentar a fuego medio durante 10-15 minutos. Luego, lavar con jabón y una esponja suave para eliminar el exceso de aceite. Para pailas y cacerolas simplemente lavar con detergente líquido, una esponja suave o paño y secar bien.
• No rayar con utensilios metálicos.
• ¿Manchas? Para evitarlas te recomendamos secar los productos inmediatamente después de lavarlos.
• Para recuperar el brillo/quitar manchas del menaje hervir agua con vinagre en proporción de cuatro (4) partes de agua por una (1) de vinagre durante 4 o 5 min y luego lavar de forma convencional.
• NO utilizar el producto para almacenar la comida, los ácidos y sales de los alimentos en contacto prolongado pueden deteriorarlo y producir corrosión.

El Aluminio Anodizado, es uno de los materiales más duros fabricados por el hombre, maneja una resistencia 30% mayor a la del acero y además es excelente conductor de calor, debido a esto los alimentos se cocinarán mucho más rápido y homogéneamente. Por otro lado, el anodizado es un tratamiento electrolítico al que se somete el menaje de aluminio para dotarle de una superficie resistente al desgaste y a la corrosión, lo que le da una gran resistencia física y mecánica.

Entre otras ventajas del aluminio anodizado, evita que el metal se transfiera a los alimentos, incluso con altos contenidos ácidos y la capa anodizada cierra los poros del aluminio, evitando la proliferación de hongos y bacterias.

¿Cómo cuidar nuestros productos de aluminio anodizado?

• Se recomienda que antes del primer uso, se lave la pieza con agua tibia, un jabón neutro de cocina y una esponja suave. Luego llenar con ¾ de agua y llevar a ebullición durante 10 o 15 minutos. Así, se eliminará la suciedad y los restos grasos de fabricación.
• Después de cada uso, debe lavarse con agua caliente, esponjas suaves y jabón neutro.
• Evitar usar estropajos metálicos o esponjas ásperas ya que esto rayará la superficie e irá perdiendo su desempeño y el de su antiadherente. Utilizar utensilios de nylon o madera resistentes al calor.
• Si se trabaja en cocinas de gas, es importante evitar que las llamas sobrepasen la base del menaje y suban por los laterales de la olla o sartén. Esto, protege la parte externa del producto y ayuda a que la distribución del calor sea mejor.